Cumpliendo un sueño que nunca tuvimos
23 julio, 2011

Por: Jorge Mario Ceballos Naranjo – Tigre Blanco, y Juan Diego Escobar – Buho con alma de Tigre [mudslide:picasa,0,tiguala5,5628526576336697601,57,250,right]

Nunca se nos pasó por la cabeza que algún día fueramos a Austria, es más, cuando estabamos en Italia todavía no podíamos ubicarla en el mapa, pero pues gracias a las buenas lenguas de algunos conocidos que ya habían ido nos atrevimos y llegamos a Viena, capital del viejo Imperio Austrohungaro, y nos sorprendimos porque ¡vaya que ciudad tan hermosa!. Nos alojamos en la casa de Luz Helena una amiga de la familia Ceballos Naranjo, le agradecemos por sus tortillas españolas y su arroz italiano. Al salir a descubrir la ciudad nos encontramos con el Palacio de los Hasburgo, antigua casa de los emperadores Austriacos, más tarde fuimos al Salón donde Mozart dio su primer concierto, después fuimos al centro a ver los monumentos y parques que adornan la ciudad. Se respira música clásica por todas partes, pues es donde nació Mozart, después fuimos por el centro histórico y mientras tanto vitriniabamos, nos detuvimos unos minutos en la tienda de Rolex a hacer cuentas de qué podríamos comprar con los relojes de 40.000 euros… luego tomamos un par de cervezas y a dormir… Vale la pena conocer Viena.

 

 

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