Tropa
Turzagas
La Purga: Campamento de Tropa
28 marzo, 2017

Por: Alejandra Cardenas Quintero – Pantera con Alma de Águila

Cuando se piensa en la purga, la única palabra que puede venir a la mente es “Sobrevivir” y precisamente este era el objetivo de los Turzagas durante su primer campamento de este año scout.

El lugar escogido para realizar la tan temible “expiación” estaba ubicado en la vereda «Espartillal de el Alto del Guamo», y al cual la Tropa llegaría el sábado 18 de marzo alrededor del medio día, momento en el que se dieron cuenta del verdadero significado de “sobrevivir” pues aunque el sitio era muy hermoso, no tenía ninguna comodidad encontrada en la ciudad (si, de verdad eso de los servicios públicos no existe en el monte).

Como consecuencia de lo anterior, su primera prueba a superar fue adecuar el campamento para tener comodidad dentro de su estancia en dicho sitio, por ende como su lema lo dice: “Siempre Listos” se pusieron a la obra de realizar algunas construcciones como la letrina, la portada de campamento (que daba la imponencia necesaria para un verdadero campamento “Turzagas”) la armada de las carpas y la cocina; para que a la llegada de la tarde se tomaran las respectivas fotos de lo que sería su “ciudad” durante los tres días que duraría dicha aventura.

En la noche, ya inaugurado este campamento, y como forma de recordar a nuestra manera a esos hermanos que acampan en el cielo desde hace once años, se realizó reunidos alrededor del fuego una ceremonia en donde se recordaron sus nombre y sus vidas, y se resolvieron varias dudas sobre lo acontecido aquel día. Nuestros 11 hermanos scouts que muchos no conocieron, nos acompañan en cada una nuestras travesías. La noche concluyó con una ceremonia de totemnizacion,  en la cual varios de nuestros chicos recibieron su «Totem» o nombre Scout.

Luego de la ceremonia y cuando ya estaban dispuestos a dormir y a recargar baterías para los otros dos días de campamento, el clima trajo consigo otra prueba, en forma de un aguacero torrencial que empezó a caer a media noche y solo finalizó luego del amanecer del domingo; debido a esto muchos tuvieron que recordar su aprendizaje sobre pionerismo y que se debe hacer en casos de inundaciones de carpa ( DICEN que eso de templar bien las carpas dizque hasta sirve) y resolver en el acto el problema de manera conjunta, así que esa recarga de energías se postergo hasta las 3:30 de la madrugada cuando luego de un plan de “salvación” todos volvieron a sus ya no tan cómodos ni secos sleepings.

La mañana de ese domingo aunque fría por demás fue muy productiva pues se aprovecharon los escasos rayos de sol que habían para secar la ropa que se había mojado (por algo se les dice que las empaquen dentro de bolsas) y organizar nuevamente las carpas para prevenir otra inundación.

Después de terminar con esta tarea y de alimentarse con un delicioso desayuno, se realizó una «Misión de Tropa» en la cual se pudieron ver hermosos paisajes y donde la tropa además de aprender de la historia de la vereda, también pudieron planear la “pequeña broma” que le iban a realizar a la dirigente Alejandra Cárdenas apenas llegaran de nuevo al campamento que iba a hacer alrededor de las 4:00 de la tarde.

Nuevamente en el sitio y luego de comer unas deliciosas lentejas con chorizo (gracias a Sergio y Suri que como buenos hermanos mayores los cuidaron mucho) realizaron aquel acto “malvado” que planearon durante de todo el trayecto, y volviendo a las tradiciones colombianas hicieron la típica “empanada” al morral de campamento de la dirigente (incluso quitaron las varillas del morral -.-) causándole en primer lugar una pequeña ira a ella pero que se resolvería con muchas risas y obviamente “desempanedando” el morral.

Llegada la noche y luego de un más que merecido descanso y comida, llegaría la hora de “purgar” actividad que se realizaría en forma de acecho por equipos y en el cual las reglas existentes era solo las que ellos mismos pondrían y las que los padres fundadores (Dirigentes y la Guía Mariana Vallejo) quisieran; juego en el cual demostraron sus habilidades para camuflarse con el terreno y que gracias a muchas estrategias creadas, pudieron sobrevivir a los ataques de pintura que el otro trataba de realizar. Después de mucha pintura y risas el juego terminó con la lección que un juego sin reglas no es tan divertido (pues no se está en las mismas condiciones todos), cada uno se retiró a sus respectivas carpas esperando que esa hermosa noche estrellada siguiera y se pudiera dormir de forma seca y tranquila.

Cerrando la última noche de este gran campamento la Corte de Honor (Guías y Subguías) junto con la dirigencia realizó una ceremonia especial en el cual se recordó el valor de la unidad y responsabilidad necesario en estos cargos, y donde estuvieron acompañados por un sinfín de estrellas y una luna gigantesca que los saludaba como si quisiera darle un toque místico final a lo maravilloso que fue ese fin de semana.

Ya en la mañana del lunes y luego de tantas aventuras, la Tropa IV Turzagas se dispuso a levantar el campamento para poder dejar el sitio que los acompañó y enseñó durante esos días y poder volver al hogar y compartir con cada una de las familias, tantas historias vividas y tantos recuerdos scouts que se habían creado, y con la firme convicción que no hay una forma más linda de conmemorar y de aprender que al aire libre y viviendo lo que es en verdad la Ley Scout, incluso para sobrevivir a una “PURGA”.

PD si alguien tiene fotos de la bendita empanada al morral mío (Aleja Cárdenas) súbanlas, al igual que cada una de sus pequeñas historias alrededor de este genial fin de semana.

Vea el álbum completo en: La Purga